A elegir invito yo
Una intro de redoble misterioso
abraza tu ligadura expresiva
y oscura se incendia tu pupila viva,
que ilumina el silencio roto.
Se enfrían tantas preguntas al mar
como empapan respuestas de nieve.
Dime que te escucho, brinda, bebe,
el último momento es para saltar.
Acércame tu mano y sigue riendo,
qué felicidad estacional floreciendo
cuando caminas, respiras y amas.
Gloria a Dios en lo alto del cielo,
solo esperaba que llegara este vuelo,
alfa y omega, mi credo de palabras.
Movimiento atrapado
Un viento rompe y escapa,
mantiene un silencio roto
de antítesis andante con moto
despacio, señorial te atrapa.
Es contigo cuando suspiran mis manos,
vibra el cuerpo, rompen lágrimas
y acompaña a tempo tu ánima
como el hijo, la madre y los pasos.
Sombra de blues en las miradas,
para cuando vuelva tu sonrisa
por el camino que dejó la brisa
que acompañó las letras grabadas.
Terraza 4 m
Maldita ley de ley de leyes frías,
condicionamiento instrumental roto,
pudiéndose agrupar con sólo un voto,
ignorando arpegios y trinos de alegrías.
Nace y muere la paz, la felicidad
del arrullo del agua, del árbol verde,
de la risa que mi amada pierde
con el viento de las calles de la ciudad.
Ten paciencia, escribe y espera,
que, cuando esto termine, descubrirás
la ciencia que escribe y espera.
La energía y el amor duermen en sueño
y lágrimas no dejan su desvelo jamás,
Dios quiera la luz de su único dueño.
SIN PRISAS
El traje gris, rizo y corbatas
visten una historia repetida,
llena de color risa pervertida
la puerta, el vaivén de despedida.
Temblor de acera, reto y ratas
desnudan tragicomedia y canguelo.
Precio y moral repicotean al vuelo
de acordes que apaciguan este suelo.
Hablando, caminando, mirando,
tirando, cantando, soñando,
bailando, esperando y amando.
Ánima de Cherubim
El aroma a jazmín de las novias
levanta y viste de color el día,
tan joven, tan rosa… que ría
y toque y queme tus fobias.
Brindan copas con su cara,
es ella la que ve cuando mira,
modela el aire, crea la brisa,
embrujo y duende con máscara.
Hermana de la Oda de Beethoven,
prisma de dones convergentes.
Creas, piensas, disuelves, existes.
Imposible como creerse imposible,
catarsis de descartes hasta el confín,
es tu ciencia new el ciclo sin fin.
VENENO DE VIDA
Trinos doblando esquinitas del alma
dibujan sonrisas en rostros grises.
Zapato, altura y caras de mises
que truecan moda por calma.
Respondiendo preguntas esperadas,
preguntando respuestas ignoradas.
Triangulando:
Amor
Felicidad
Libertad
Pícame y llévame contigo.
Mas una noche llama a tu puerta
un delicioso brote castellano puro,
que, con quebrantada alegría abierta,
ríe, llora y vive con un euro y un duro.
Y otra vez me escriben catorce fotos,
que no recojo, mas regalo y olvido.
Mientras pierden botellas SMS rotos,
que canto bajo mi lluvia, aquello vivido.
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