OCTUBRE-DICIEMBRE 2016    

         94 PÁGINA 4

   ;

   

   

MI PINCEL Y YO

   

  

Por Hilario Esteban López

   

   

   

MI PINCEL Y YO

Yo también quisiera chorrearme de ti

como las hebras de mi pincel,

ahogado en el hondo pigmento 

besando tus labios

carmín.

   

   

CREPÚSCULO

Retazos incompletos llanos y escurridizos,

siluetas enjambradas de colores,

la sombra fluida en las nubes,

huella alba del viento.

 

Nada más un grito de apertura a la noche,

desde la omega mismo del día;

me doblego ante ti

en esta hora que despiertan mis manos

para cincelarte con la palabra.

 

La pluma escurridiza se apoltrona

como un pichón entre las alas

de mis soberbios dedos,

arañándote la piel

con la curva de una coma.

 

Y me da por cantar a ritmo lento

en el sonido cansado de este lápiz

que escribe apresurado

la sola danza del beso

de esta punta eriza

arpegio efusivo sobre el papel.

 

Cae la sílaba como un vértigo de la rama,

sin coma, ni acento,

punto y aparte del verso

que da vida a tu nombre.

 

Raras veces te emancipa mi alma

y te escondes en mi palabra

como la manzana de Adán

que llevo en mi garganta .

 

Nunca es tarde

aunque se frise el verso

en la postrera llegada.

Tarde es nunca

haber llegado en el carril de doble vía.

 

Sentir el postrer susurro

de tus labios en mi cuello a la hora,

cuando la oscuridad

se vuelve fría.

Cuando ya nada vale.

Si es tarde o es noche

o crepúsculo para  amarte todavía.

  

  

POR TI

Ayer,

en la penumbra acelerada de una calle

tatareaba un mendigo tu canción,

le seguí,

engolfando diagramas con mis pasos.

 

Se afilaba mi oído.

Casi ínsito amenazaba el viento;

la tarde era serena,

tres o dos cuerpos de cercanía;

le miré de frente,

sin la más mínima duda

estaba hambriento,

él, por el minúsculo bocado de un día,

yo, por tu recuerdo incoherente.

 

Por ti, deambula marchita la tarde,

por ti, le disfracé una sonrisa,

por ti, aquella hora se engalana de repente,

por ti, soy quien soy,

quizás noctambulo, infectado de nostalgia,

drogado de versos, imbécil anacoreta,

o tal vez melodía estridente.

 

¡Ah!,

qué triste suena tu nombre ausente.

 

Pero por ti, ¡sólo para ti!,

he inventado ser poeta.

  

  

MIENTRAS, POR ALLÍ

Mientras, por allí,

tus pies pisan donde no conozco

y tus manos se pierden en hexasílabos cuadripléjicos.

Mientras aflora la quimera de tus deseos

y se allanan tus pasos lerdos,

yo frecuento las mismas calles,

aquellas mismas esquinas,

aquellas gárgolas que, mudas, fueron testigos de nuestros besos;

aquella  alameda que parpadeaba sus luces de neón,

jugueteando con el brío de tus ojos.

Entonces huía la sombra asustada,   

encogiéndose bajo tus pies.

 

Me pregunto: ¿acaso un suspiro perdido por allí?

 

Mientras el viento arrebata tu pelo

y tu boca detiene el beso de labios ajenos,

me enciendo en celos,

me arrebata como un cojo y luego me detengo.

Tal vez el carmín de tu boca

quedó marcado por allí.

¿Y no sé?

 

No sé por qué algunos días son astillas en carne.

Duele la nostalgia, refriega la melancolía,

una tormenta de suspiros clama tu nombre todo el día,

mi voz acalambrada pregunta por ti,

y sé, sé que existes por allí.

 

Algún día, cuando pintes canas

y mis ojos turbios busquen luz en tu vago recuerdo

y encuentres esta huella escrita,

sabrás quién eres, lo que fuimos y seremos, siendo ajenos.

Y entonces, tal vez,

sólo tal vez, haya inventado mi vida sin ti.

Tal vez,

sólo tal vez, mi boca, ajada por la vejez,

te dé el último beso,

aquel último beso,

por estar aquí.

  

  

DÍMELO

Dime que te olvide,

pero dímelo de frente,

como cuando tus ojos

sedujeron los míos

y tus sístoles danzaron

en mis diástoles;

en la piedra dormida

de mi pubertad,

allá en la montaña,

en nuestro pueblo clandestino,

chispa y lava,

gota y tempestad

 

Allá, cerca del cielo.

  

  

HAZME UN DIBUJO

En la palma de mi mano,

un dibujo de anécdota,

de sílaba atrevida,

de humor extraño,

de ceros en conducta.

 

Hazme un dibujo con tu boca

con la firma de tus suspiros,

donde atentamente se cierren tus ojos

para sentir lo que siente el alma

con la dulce melodía

al paso blondo de tus labios.

 

Hazme un dibujo

en el corazón que robaste a hurtadillas,

con tu palabra húmeda,

hasta que ruborice el curvo de tu mejilla.

   
   

   

    

    

     
    

HILARIO DE JESÚS ESTEBAN LÓPEZ (Ipala, Chiquimula, Guatemala, 1975). Maestro en Educación Primaria Urbana. Amante de la poesía lírica, el dibujo y la pintura. Gran parte de su obra ha sido dada a conocer a través de diversas revistas digitales. Ha participado en varios certámenes internacionales de Poesía. Es autor de una amplia colección de sus poemas y relatos líricos, aún inéditos, que verán pronto la luz en su primer libro. Es titular del blog «Desde el Corazón», desde donde da a conocer su creación literaria.

    

    

GIBRALFARO. Revista de Creación Literaria y Humanidades. Publicación Trimestral de Cultura. Sección 2. Página 4. Año XV. II Época. Número 94. Octubre-Diciembre 2016. ISSN 1696-9294. Director: José Antonio Molero Benavides. Copyright © 2016 Hilario Esteban López. © La imagen ha sido tomada de una base de imágenes gratuitas localizada en Internet y se usa exclusivamente como ilustración del texto. Los derechos de autor pertenecen a su(s) creador(es). Depósito Legal MA-265-2010. © 2002-2016 Departamento de Didáctica de las Lenguas, las Artes y el Deporte. Facultad de Ciencias de la Educación. Universidad de Málaga.