I
Contigo
vida que me vives
vida que te vivo
me senté en bancos de madera
de encajes de hierro
de piedra arisca
me revolqué en el frescor del barro
y me unté pegajosas mermeladas
tarareando las canciones del olvido
contigo
senté mi sombra a la luz de la farola
mi silencio acogió la campana silenciosa
se extravió mi pensamiento
ente máscaras códices mapas
alfombras murales y grecas
resbalando siempre por el sol
envuelta en rojos y naranjas
me tomaste de la mano
me empujaste
me arrastraste
me trastrabillaste
por senderos calles rutas
adoquines polvo asfalto
y cruces en el lindero del camino
¡úsame!
me gritas
pues yo… te uso
¡víveme!
pues yo… te vivo
II
Contigo vida
vida que me vives
vida que te vivo
me sorprendió lo tuyo
te sorprendió lo mío
lagrimeé la neblina del mar
temerosa ante la melancolía de la nada
inmóvil ante tumbas sepultadas en sí mismas
y la sequía cobriza del llanto
contigo
mar sin tierra selva sin rugido
valor húmedo reseco abrazador
escribí sobre el que ama el que teje el que vende
el pobre… el rico… el más pobre
soñé jirones de tu cuerpo sobre el mío
el río verde la montaña ceniza
y manzanas acarameladas
me asiste de las caderas
me enredaste
me aventaste
me retuviste
por plazas mercados jardines
acacias apamates gentíos
barrancos cañadas cerros
¡mírame!
me gritas
pues yo… te miro
¡pruébame!
pues yo… te pruebo
III
Contigo vida
vida que me vives
vida que te vivo
me incrustaron caricias
estrepitosas exhaustas exquisitas
acampé entre besos y semillas
tomé de las manos a los dioses
nada me hicieron sentir
nada me dijeron al oído
contigo
ahogué mi boca en tu silencio
mi plenilunio quedó sin lunas
frío cortante lágrima estalagmita
poemas en el vestíbulo del tiempo
gateé sobre las sombras
el lago amarillo las sierras lilas
y me engolosiné en algodón de azúcar
me ceñiste la cintura
me contoneaste
me esquivaste
me atolondraste
por espigas ramajes polen
trigo madera lirios
y me floreció la mirada
¡pálpame!
me gritas
pues yo… te palpo
¡levántame!
pues yo… te levanto
IV
Contigo
vida que me vives
vida que te vivo
me orné el cuello con obsidianas
lágrimas del volcán
desaté el corazón del olfato
hinojo enebro cilantro canela
infusiones afrodisíacos adormideras
desperté duendes hechizos magas
y golpeé el viento de las afueras
contigo
contoneé las caderas de la algarabía
acompasé mi lujuria a tu lujuria
se deleitó el bravío cuerpo
entre retales fosforescencias aventuras
hombros pubis pezones cabellos
refugiándome en silentes noches
arrullada en días besados por la luna
me retuviste la mirada
me enamoraste
me celaste
me arrullaste
por ropajes alcobas ventanales
aromas lencería lugares
y alientos sin sosiego
¡disfrútame!
me gritas
pues yo… te disfruto
¡gózame!
pues yo… te gozo
contémplame desde el poema
porque en tu vida está mi historia
porque en tu historia está mi vida. |